
Todos venimos a este mundo con la herencia de nuestros primero padres, naturaleza caída, donde su fruto es separación de Dios, creyendo que todo lo sabemos, que somos autosuficiente y tratamos por nuestros medios conseguir o labrarnos un destinos, sea por estudios universitarios o por injerencia de nuestros padres o la sociedad donde nos movemos, pero no tenemos en cuenta cual es el propósito de Dios al habernos traído a este mundo.
Solo si nos entregamos a y lo reconocemos como nuestro Padre, podremos tener una vida con propósito, apoyados por Él y guiados por su Espíritu y al final sentiremos total satisfacción y completo agradecimiento, no haciendo nada con nuestras propias fuerzas sino con su poder.
Para poder cumplir y ver frutos en nuestra vida, tenemos un manual de vida, la Biblia , el libro mas traducido en todo el mundo y sus ventas no las supera ningún libro a través de la historia.
DEUTERONOMIO 8:11 Cuídate de no olvidarte de Jehová tu Dios, para cumplir sus mandamientos, sus decretos y sus estatutos que yo te ordeno hoy.
Guardar, cumplir, palabras claves para agradar a Dios, pues sin fe es imposible, fe en su Palabra 2da.de TIMOTEO 3:16,17 Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, 17: a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.
Obedeciendo su Palabra viviremos perfeccionándonos día a día, ya que Él quiere que tengamos vida y vida en abundancia, donde no nos falte nada, donde todo sobreabunde, depende de nosotros que frutos daremos ya que hay camino de vida y camino de muerte, tienes el libre albedrío para escoger.
Si analizamos toda la palabra, podremos ver que tanto en el Antiguo Testamento, como en el Nuevo, se nos motiva en todo momento, a que obedezcamos la palabra.
No cometamos el grave error, de pensar o creer, que hoy día no debemos tomar en cuenta los mandatos, leyes, ordenanzas, decretos, del antiguo testamento.
Solo debemos tener en cuenta lo que Cristo con su muerte, nos quitó, o pago por nosotros, lo que podemos resumir en todo el ritualismo, y sacrificios para expiación del pecado, de eso nos libera, cuando aceptamos, entrar a formar parte de su rebaño. Del pueblo elegido. Injertados, en el olivo, y no por obras, es solamente por fe.
Debemos ser muy cuidadosos, en todo lo referente a aplicar la Palabra a nuestra vida. No debemos aceptar, solo las enseñanzas humanas, debemos confirmarlo con la palabra. Y pedir en todo momento revelación, mas no pretender interpretar, porque ya fue interpretada, de lo contrario no hubieran podido escribirla.
La Palabra es escrita ya no en tablas de piedra, es escrita en nuestros corazones, para que en todo tiempo nos este redarguyendo, enseñando y corrigiendo, por medio del Santo Espíritu.
Te invito que hagamos este recorrido durante el presente año para poder ver nuestras vidas transformadas y el Rey de Reyes y Señor de Señores, reine en nuestras vidas. Amén y Amén.
Escrito por: Jorge Fegali Dìaz, de Colombia.