Mi jefe sabía decir: “el dinero no hace la felicidad, pero soluciona una muy buena parte!”
La verdad, es que si nos desprendiéramos más de la “dependencia” que tenemos al dinero, volvería solo, ¿o acaso Dios miente cuando dice: “siembra y luego cosecharás”?
Es bueno y sabio depender de Dios, en vez del dinero y cuando se habla de fé, muchos tienen en el pensamiento una ecuación:
FE = NADA
En parte la fé es la certeza de lo que no se vé, pero cuando no vemos dinero o pasamos crisis economica, nuestra fé se acaba rápido!
Hay gente que no puede estar sin dinero y sin ver…
La cuestión es que Dios no funciona como nosotros, Dios no está preocupado por nada pues a El nada le falta, él es rico en todo!
Entonces… si Dios quiere nuestra prosperidad y bienestar, ¿por que no nos dá???
Pasa que nosotros queremos funcionar a nuestra manera, como se nos dé la gana y la mayoría de las veces estamos equivocados.
En cuanto a las finanzas, Dios tiene poco para decir, y si decides seguir sus instrucciones, tu economía puede mejorar, aunque el mundo se caiga en crisis.
- Primero deja de amar el dinero antes que a Dios:
Eclesiastes 5:10 “El que ama el dinero, no se saciará de dinero; y el que ama el mucho tener, no sacará fruto. También esto es vanidad”
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- Segundo, siembra lo que desees cosechar:
Lucas 6:38: “Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo; porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir”
- Tercero, descansa, confía en Dios:
Proverbios 23:4 -5 “No te afanes por hacerte rico; Sé prudente, y desiste.
¿Has de poner tus ojos en las riquezas, siendo ningunas? Porque se harán alas Como alas de águila, y volarán al cielo”
- Cuarto, cuida tu integridad y tu corazón:
Proverbios 22:16 “El que oprime al pobre para aumentar sus ganancias,
O que da al rico, ciertamente se empobrecerá.”
Proverbios 28:6 “Mejor es el pobre que camina en su integridad, Que el de perversos caminos y rico.”
Lo que Dios más desea es tu corazón rendido a El, la clave para ser exitoso en la vida es muy simple, AMA A DIOS Y BÚSCALE, Y TODAS LAS COSAS VENDRÁN COMO UN REGALO DEL CIELO.
Dios te bendiga!