Mujeres maltratadas
Reinas y Princesas, sólo un cuento…?
¿Quien no quiere ser reina o princesa cuando sólo eres una niña?
Recuerdo que mi hermana, mis amigas y yo nos disfrazábamos con los camisones de mi mamá y jugábamos a las princesas.- Nuestra higuera en medio del patio, era el castillo y quien subiera primero a las ramas en forma de trono era la reina. Casi siempre fui mas rápida que las demás niñas, así que yo era la ganadora y merecedora de ser la reina…
¡Que lindos recuerdos!!!
Hoy mi esposo cariñosamente me dice: “hola mi reina!…” y la verdad… cuando veo los platos para lavar, la ropa para planchar, mamaderas por preparar y cocinar sin descanso, digo:
-“no gracias. Si esto significa ser la reina de la casa, prefiero ceder el trono a otra!”-
La Biblia nos anima a las mujeres a vivir como reinas y princesas de un Reino Santo, aunque dentro de tu casa vivas mas bien como una esclava, quizás maltratada física o verbalmente, o te veas y te sientas menospreciada, poco valorada por todos…
¡que difícil ser mujer! Y que lejos estamos a veces, de ser reinas o princesas!
Ser mujer implica tener en mente muchas cosas, para eso, nuestra mente, debe estar en orden y normal.
El orden de tu mente puede ser hecho en la medida que puedas conservar la calma.
¿Cuándo mi mente está ordenada o normal?
Tu mente está normal cuando puedes pensar tranquila y serenamente.
Si tu mente esté llena de razonamientos, temores, preocupaciones, ansiedades y cosas asi… se puede decir que está “anormal o desordenada” eres maltratada mas bien… por tus propios pensamientos y puedes perder de disfrutar vivir como reina, aunque en tu casa parezcas esclava.
Todo está en tu mente, en tu pensamiento diario.
¿Qué estás pensando?
Si puedes acallar las voces que te dicen que nunca vas a lograr salir de tal problema o de tal situación o librarte de tal hombre… entonces estarás logrando mantener tu mente normal y será mas fácil que Dios te hable para ayudarte con tu situación.
El que no oye, es porque tiene demasiados pensamientos que dan vueltas en su mente y le será difícil tener paz o mantener la calma en medio de los problemas.
Isaias 26:3 “al de firme propósito, guardarás en completa paz, porque en ti confía”
Si pones de tu parte y tomas la decisión de ser firme con respecto a tus pensamientos y dejando la ansiedad y preocupación y temores de lado, Dios te guardará en completa paz, sólo tienes que confiar.
Anímate mujer, camina diariamente con paz…con la dignidad de una reina!
Dios te bendecirá, porque también me bendijo a mí.